Todos conocemos a alguien que se come una zanahoria en el descanso a medio día del trabajo, en el colegio, en la Universidad o en casa. El que dice una zanahoria, dice una pieza de fruta, un tomate o un pepino pelado y cortado a la mitad, con un poco de sal. Pero lo cierto es que esta especie de crudívoros son una excepción. Pero ahora te vamos a decir los beneficios que esto tiene para tu salud.
¿Por qué debemos comer zanahoria?
Teniendo en cuenta que entre el desayuno y la comida por lo general pueden pasar entre cinco y seis horas, es difícil resistirse a picar entre comidas. No obstante, incluir a media mañana un aperitivo, snack, tentepié y una merienda a eso de las seis de la tarde, no está contraindicado por los nutriólogos. Lo importante es mantener una regularidad en lo que se refiere a los horarios de las comidas, no salirse de las horas fijadas, y lo más importante, comer sano.
Los snacks de media mañana son bastante peligrosos, al ser un momento del día en el que la mayoría nos comeríamos cualquier cosa rica, dejando la conciencia para más tarde. Además, para mucha gente es difícil establecer rutinas de comidas en el descanso de la mañana y en la merienda. Es por ello que debemos cambiar cualquier bollería industrial, golosinas o papas fritas, por snakcs saludables.
En concreto, las zanahorias son un estupendo recurso para matar el hambre en las horas intermedias entre las principales comidas del día, porque además de estar muy buenas y de ser muy refrescantes, tienen unas propiedades magníficas. Por su alto contenido en betacaroteno (un compuesto que se transforma en vitamina A en el organismo), son un alimento estupendo para mantener la salud de la piel y para la vista. Ofrecen un aporte de antioxidantes, ayudan a proteger nuestras células. Y por sus muchos minerales, son buenas para el intestino, para el hígado y facilitan la expulsión del exceso de colesterol.
Recetas
Chips crujientes
Ingredientes
- Zanahorias grandes (a ser posible ecológicas)
- c/n de sal
- c/n de pimienta negra recién molida.
Preparación
Lava las zanahorias, pélalas con un pelador de vegetales y córtalas muy finas con la mandolina. Puedes hacer los cortes como más te gusten, redondos o alargados, aunque como su tamaño se reduce bastante, mejor que sean un poco largos.
Sobre la cantidad de zanahorias que se deben hacer por persona, pues depende de cuánto se quiera comer, piensa que la zanahoria es mayoritariamente agua, por lo que al extraerla para convertirla en un snack crujiente, se pierde prácticamente todo el volumen, y si en crudo te comerías sólo una zanahoria, deshidratada te podrías comer tres o más.
Cubre un plato apto para microondas con papel encerado y coloca las láminas finas de zanahoria, condimenta con sal y pimienta e introdúcelo en el microondas y programa unos cinco o seis. Vigilando de vez en cuando si cambian de color. Cuando empiecen a tostarse, retira la zanahoria del microondas y pasa los chips, que no estarán crujientes del todo, a una rejilla. Cuando se enfríen estarán crujientes.
Empieza cuanto antes a preparar snacks deliciosos con zanahoria. En La Hortaliza somos tus aliados para que cambies a hábitos más saludables.